READ: Our new comic, Broken Stems, is a story about how California prisons tear apart families by voluntarily colluding with ICE.

Marisela Andrade: "No me voy a rendir"

September 6, 2023 Perspective

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En colaboración con Survival Media Agency, la serie fotográfica Home, Not Heartbreak (Hogar, no Angustia) recoge las historias de californianos que se han visto directamente afectados por el proceso de transición del sistema de prisión estatal al ICE. Los inmigrantes y refugiados californianos se están organizando para garantizar que las reformas de la justicia penal existentes y ampliamente respaldadas se apliquen a todos por igual, independientemente de su situación migratoria, y que más californianos puedan volver a casa y reconstruir sus vidas. Si bien estos miembros de la comunidad representan solo una muestra de los miles de familias y residentes de California perjudicados por los traslados injustos de ICE cada año, sus historias y liderazgo están inspirando a personas de todo el estado para urgir a sus legisladores y al gobernador Newsom a aprobar y firmar HOME Act (AB 1306) (Proyecto de Ley de la Asamblea 1306) y reunificar a las familias inmigrantes.

En una reciente tarde de verano, el calor sofocante es palpable, pero el ánimo de Marisela Andrade es alto mientras saluda a familiares y amigos que han venido a la ciudad para celebrar su cumpleaños. El grupo intercambia charlas y abrazos mientras sonríen emocionados de estar juntos. Es una ocasión especial, no solo porque es el cumpleaños de Marisela, sino también porque no hace mucho tiempo, esta reunión habría sido impensable.

El pasado mes de marzo, Marisela pudo reunirse con su familia después de más de 15 años de haber pasado encarcelada por el sistema penal estatal de California y dos años en un centro de detención de inmigrantes en Aurora, CO. Más de mil millas de distancia de su casa en California, Marisela aguanto condiciones de explotación en el centro de detención de U.S. Immigration and Customs Enforcement, ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos). Vivió bajo la amenaza de ser deportada a México y sus reiteradas solicitudes de atención médica fueron ignoradas. Una experiencial terriblemente común para innumerables miembros de la comunidad detenidos por ICE. Estados Unidos había sido su hogar durante más de dos décadas y a pesar de los malos tratos de abuso y el miedo con los que le tocó lidiar Marisela continuó diciéndose a sí misma: "No voy a rendirme".

Marisela Andrade en el exterior del Centro de Justicia Comunitaria de Fresno. (Justin Katigbak | Survival Media Agency)

Ella comparte: "ICE es algo muy difícil. Trabajé en la lavandería y haciendo limpieza. Me pagaban un dólar al día. Les dije a los médicos que me dolía la cadera. [Los médicos] no te prestan atención. Todo es horrible ahí dentro".

Antes de que Marisela fuera transferida a ICE por los funcionarios de la prisión de California, había estado ocupada. Aprendió inglés, empezó a hacer crochet y participó en grupos de autoayuda enfocados en temas de violencia doméstica y dinámicas de abuso. Varios años después de haber estado en prisión, Marisela solicitó la conmutación de la pena al gobernador Brown. El gobernador acortó su condena, haciéndola elegible para una audiencia de libertad condicional. Un año depues, la Junta de Libertad Condicional también acordó que Marisela estaba lista para reintegrarse a su comunidad y aprobó su libertad condicional. Con estos dos pasos significativos a su favor, Marisela comenzó a prepararse para su liberación.

La crueldad del sistema penal de California y de las políticas de inmigración hicieron que ninguno de sus serios esfuerzos para superar el trauma derivado de la violencia doméstica y demostrar remordimiento por daños pasados importó cuando salió de la cárcel. El Departamento Correccional y de Rehabilitación de California retuvo ilegalmente a Marisela pasada la fecha de su puesta en libertad para poder transferirla a la custodia del ICE, privándola así de su familia y amigos que la esperaban a las puertas de la prisión.

Recuerda que en ese momento se dijo a sí misma "Estoy fuera, pero ahora vuelvo a entrar". Cuando pasaba por la autopista de Bakersfield pensó, mira, aquí están mis hijas. Me puse contenta, pero triste porque sabía que me iban a volver a encerrar".

Marisela Andrade toma fotos de amigos, familiares y simpatizantes durante la celebración de su cumpleaños (Justin Katigbak | Survival Media Agency)

Mientras Marisela luchaba por su libertad fuera de la cárcel y del ICE, un creciente grupo de partidarios y defensores de California Coalition for Women Prisoners, CCWP (Coalición de California para Mujeres en Prisión) se han convertido en una importante fuente de esperanza. Junto con la coalición ICE out of California, han reunido firmas pidiendo al gobernador Newsom que indulte a Marisela y así no vuelva a ser amenazada con la deportación y pueda volver a casa con su familia. (¡Apoye la campaña por el indulto de Marisela y agregue su nombre a la petición estatal!)

Marisela reflexiona también sobre el apoyo de su iglesia y del Centro de Justicia Comunitaria: "No sé qué me motiva, le doy gracias a Dios por el apoyo que tengo, porque tengo mucho apoyo y siempre me están animando para que no me rinda".

Con el apoyo de esta comunidad, Marisela pudo salir de la detención del ICE. Este verano, pudo disfrutar de un pastel de cumpleaños y globos festivos con sus seres queridos y simpatizantes, eso le produce una mezcla de emociones. "Me encantó. También me puse muy nerviosa porque querían que hablara. Sentí todo el apoyo que me están dando. Y aunque a veces me siento sola, digo bueno, no estoy sola, tengo mucha gente a mi alrededor."

Los asistentes a la fiesta observan cómo Marisela Andrade recibe un pastel cubierto con velas de cumpleaños. (Justin Katigbak | Survival Media Agency)

Hoy, Marisela se mantiene enfocada en cumplir con las condiciones de su libertad condicional, mientras se prepara para un futuro incierto. Además de la amenaza de deportación, le preocupa cómo puede mantenerse y recibir tratamiento para sus lesiones de larga duración. Encuentra consuelo en cantar en el coro de su iglesia y espera algún día ir a la playa. Cuando se le preguntó sobre planes más grandes, ella contestó: "En uno de los programas [de la prisión], Breaking The Chains, me dijeron que me ayudarían a borrar mi registro. Si ellos pueden hacerlo por mí, me gustaría trabajar ayudando a personas mayores, cuidándolos. Y me gustaría ser voluntaria en CCWP, y asi poder ayudar a otras mujeres".

Amigos, familiares y simpatizantes se reúnen alrededor de Marisela para una foto. Esta comunidad también la está ayudando a abogar por su perdón. (Justin Katigbak | Agencia de Medios de Supervivencia)

Miles de californianos como Marisela han logrado su puesta en libertad y salir de la prisión y corren el riesgo de ser deportados y separados de sus familias. La legislatura estatal está considerando actualmente la AB 1306 (Proyecto de Ley de la Asamblea 1306) o el Harmonizing Our Measures for Equality, HOME, Act (Ley de Armonización de Nuestras Medidas por la Igualdad), que evitaría que California transfiera al ICE a cualquier persona que haya obtenido la liberación de la prisión estatal a través de recientes reformas de la justicia penal, incluidas las acciones de clemencia del gobernador. Para Marisela, el proyecto de ley cambiaría su vida. Ya no sería definida por su gran equivocación. Marisela desea que "el gobernador de Sacramento, donde se hacen todas las leyes, pueda entender un poco, o quizás por un momento ponerse en nuestros zapatos, pues como todos también pudieran cometer los mismos errores. Entonces, si pusieran un poquito en nuestros zapatos, deberían aprobar esas leyes".

Marisela Andrade parada en la sombra fuera del Community Justice Center (Centro de Justicia Comunitaria en Fresno). (Justin Katigbak | Survival Media Agency)

Foto por Justin Katigbak | Survival Media Agency